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Exhorta Secretaría de Salud cuidar la alimentación para
evitar riesgos
TIJUANA,
B.C.- Miércoles 23 de Abril de 2014.- Debido al incremento en el consumo de
sal de forma cotidiana, las personas se encuentran mayor riesgos de padecer
hipertensión arterial, enfermedad que puede llevar a sufrir ataques cardiacos o
cerebrales, los cuales pueden dejar secuelas irreversibles o la muerte.
Aunque la sal es un elemento que el cuerpo humano
requiere para poder llevar a cabo ciertas funciones con efectividad, el consumo
excesivo de este mineral es un serio peligro en el sistema cardiovascular, pues
produce un desgaste cardíaco, así lo expresó el Jefe de la jurisdicción de
Servicios de Salud de Tijuana, Dr. Héctor Zepeda Cisneros.
El incremento de sal en los alimentos que forman parte ya
de la dieta diaria de la familia, pues además de agregar este condimento a los
alimentos se adquieren otros que la contienen en exceso como los productos
procesados. Estos hábitos están relacionados
estrechamente con el incremento de la hipertensión arterial entre la población
mexicana.
El cloruro de sodio, mejor conocido por sal, es un
mineral que necesita el cuerpo para mantener el balance de hidratación,
facilitar la digestión y lograr una efectiva actividad muscular, y transmitir
impulsos nerviosos. Sin embargo solo se requiere una mínima cantidad diaria, la
cual de hecho se obtiene de forma natural en muchos alimentos.
El titular de la Jurisdicción señaló que un adulto sano
debe consumir 2.5 gramos
de sal al día, mientras que para los niños son suficientes 750 miligramos. Pero
se estima que el consumo de sal de un mexicano llega hasta los 5 gramos diarios.
Zepeda Cisneros agregó que la sal en exceso produce
aumento en el volumen intravascular e incrementa el desgaste cardíaco. Este
condimento está relacionado con la hipertensión, ya que se ha observado que
cuando las personas agregan a sus alimentos seis gramos diariamente presentan
hasta tres veces más el riesgo de desarrollarla que quienes ingieren poco de
este producto.
Por ello, es importante que las personas que tienden a
consumir productos con altos niveles de sal, dejen este hábito paulatinamente y
empiecen a revisarse el nivel de su presión arterial a fin de detectar si el
corazón ya presenta alguna afectación.
El Jefe de la Jurisdicción de Servicios de Salud señaló
que las complicaciones de la hipertensión arterial son enfermedades que pueden
producir son derrames cerebrales e insuficiencia renal crónica, perdida de la
visión, problemas digestivos entre otros.
Además, se puede
presentar de forma súbita la ruptura de las arterias o una hemorragia cerebral,
que generalmente es mortal. Reducir el consumo de sal es una buena decisión
para el cuidado de la salud, pero si se padece ya hipertensión arterial
definitivamente es algo que debe quedar fuera de la dieta y no tratar de
engañar tampoco al paladar con los sustitutos.
Una recomendación para ir reduciendo el consumo de este
mineral, es bajar paulatinamente el ingrediente a la hora de cocinar y retirar
todos los saleros de la mesa. Eliminar de la despensa los sazonadores de carne
o salsa inglesa. La sal se puede sustituir en forma natural con hierbas o
especies.
Los quesos, embutidos, carnes, aceitunas y demás
productos excesivamente salados se pueden empezar a sustituir poco a poco para
acostumbrar al paladar a la ausencia del elemento, el cual será rechazado por
el sentido del gusto en muy poco tiempo si se tiene constancia.
Por último funcionario indicó que la hipertensión
arterial no presenta síntomas y es un factor de riesgo para sufrir un infarto
al miocardio, por también es importante
hacer ejercicio, acudir al médico a fin de detectar oportunamente cualquier
trastorno.