sábado, 2 de junio de 2012

PRESENTAN BENEFICIOS DE LABRANZA DE CONSERVACIÓN



MEXICALI, B. C., A 2 DE JUNIO DE 2012.- El director de Agricultura de la Secretaría de Fomento Agropecuario (SEFOA), Carlos Orozco Riezgo, participó en una jornada informativa con la plática “Comparación Melgas-Camas Anchas en Agricultura de Conservación”, realizada en el Instituto de Ciencias Agrícolas (ICA) de la UABC, en las instalaciones de dicho plantel en el ejido Nuevo León.

La Labranza de Conservación es uno de los remedios más eficaces contra la degradación de las tierras, una técnica revolucionaria de cultivo en la que no se aran los campos.

Con la técnica de conservación, los agricultores dejan los restos de los cultivos en la tierra después de la cosecha, en vez de ararlos o quemarlos. Siembran nuevos cultivos con aperos especialmente diseñados, que introducen las semillas por un hueco abierto en el suelo, por debajo de la capa protectora de materia orgánica formada de residuos en descomposición.

Este nuevo método de cultivo hoy se denomina agricultura de conservación porque mantiene los elementos nutritivos en el suelo, conserva el agua al favorecer la absorción e infiltración, además de proteger la biodiversidad mediante el respeto del equilibrio natural del campo.

En la plática informativa el funcionario explicó que uno de los trabajos de investigación realizados en el Campo Experimental del ICA fue con el cultivo de trigo, siendo establecido éste cereal en melgas de 15 metros de ancho, en surcos de 1 metro y en surcos de 80 cm de ancho.

Agregó que es con el propósito de evaluar los rendimientos del trigo en distintos tipos de siembra y para dejar el predio listo para sembrarse nuevamente el ciclo venidero con trigo, pero aplicando la tecnología de labranza de conservación. Se contó con la asistencia de productores, investigadores y técnicos de campo, así como autoridades del sector.

Explicó que este año conocido como año cero, se dejará el terreno en condiciones para sembrar sobre la paja, “lo que hacemos en este recorrido de campo, es informar a los productores, técnicos y estudiantes sobre los beneficios de la labranza de conservación”.

Agregó que en cuanto a los rendimientos que se obtenidos de la investigación, es que en el caso de la siembra en surcos de 80cm de ancho, se tuvo un rendimiento de 7.7 toneladas por hectárea, dato similar que en melgas, y para el caso de surcos de 1 metro de ancho se tuvo una disminución de hasta 1.5 toneladas por hectáreas.

Subrayó que en el caso de surcos, fue significativo el ahorro de agua y fertilizante aplicado para el desarrollo del cultivo, lo que beneficia al productor al optimizar los recursos.

“Existe la conveniencia de que los agricultores roten cultivos, como de trigo a sorgo y de nuevo trigo, con labranza de conservación, sin hacer las labores culturales y sembrando sobre la paja”, indicó.

Orozco Riezgo manifestó que los próximos cinco años continuarán con labranza de conservación en el mismo sitio, para generar suficiente información validada y transferir a los productores las ventajas de usar labranza de conservación.

Expresó que la labranza de conservación ya es utilizada por algunos productores desde hace más de 15 años, quienes manifestaron sus experiencias en este evento, como fue el caso de José Luis Robles Miranda.