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Importante que padres y maestros detecten oportunamente
signos de acoso escolar.
MEXICALI, B.
C., A 22 DE AGOSTO DE 2013.- Con motivo del regreso a clases, el ISSSTECALI exhortó a los
padres de familia a reforzar los cuidados y medidas de prevención para evitar
en sus hijos padecimientos como la depresión y el abuso escolar.
La
Subdirectora General Médica del Instituto, Rosa Alicia Luna V. Gómez, destacó
que el acoso escolar, conocido comúnmente como bullying, son todas las
formas de agresión intencional de un estudiante a otro. “Desafortunadamente
estamos viendo que en el país este fenómeno crece, principalmente entre jóvenes
de secundaria”, expresó.
Un
estudiante sufre de bullying cuando es agredido física, verbal o
psicológicamente, cuando es intimidado por otro escolar y se convierte en
víctima incapacitada para defenderse por sí misma, reiteró.
Ante esta
situación, agregó, los padres de familia, maestros y todos en general, debemos
estar alertas para detectar signos que nos indiquen un posible caso de bullying
en nuestros niños y jóvenes, como: cambios en el comportamiento del niño,
cambios de humor, tristeza, llantos o irritabilidad sin causa aparente,
pesadillas, cambios en el sueño y/o apetito, negativa o protesta para ir a la
escuela.
Otros
signos, indicó, son si el estudiante aparece con golpes, hematomas o rasguños,
no quiere salir, ni se relaciona con sus compañeros, no acude a excursiones,
visitas de escuelas, etc., quiere ir acompañado a la entrada y a la salida de
clases, manifiesta dolores somáticos, dolores de cabeza, de estómago, vómitos y
pierde o se deterioran sus pertenencias escolares o personales de forma
frecuente.
Por lo
anterior, recomendó a los padres de familia fomentar con el ejemplo valores
morales, orientar y escuchar a sus hijos, participar en sus actividades,
verificar y realizar con ellos tareas escolares, conocer a sus profesores y
compañeros de clase y alimentarlo sanamente para que tenga un mejor rendimiento
escolar.
Luna V.
Gómez señaló que es importante hacer saber a los menores que no están solos y
que sus padres están para protegerlos y guiarlos.
Los cuidados
y la orientación ayudarán a nuestros hijos a reconocer situaciones de
violencia, expresar sus sentimientos y evitar ser víctimas de intimidación por
uno o varios compañeros de escuela, aseguró.
“Recordemos
que la educación inicia en casa y se fortalece en la escuela”, concluyó la Subdirectora General
Médica.
